sábado, 31 de enero de 2009

Cine de trasnoche

Y así porque sí, les dejamos una linda escena para terminar la semana. Sugerimos subir el volumen de los parlantes, el sonido original es algo bajo.



Ayer vimos esta película, e inmediatamente pensamos en éste post del Sr. Calavera.

Con cariño,

El Equipo de Proyecto Tiresias

martes, 27 de enero de 2009

El baño de Tiresias

El baño y las diferentes visiones que suscita entre hombres y mujeres fue abordado recientemente por Gabriela en este ilustrativo post, y como vemos en los comentarios se trata de una infinita lucha que nunca encuentra su solución cual madeja eternamente enredada.

Pero, ¿cuál era la visión de la antigüedad clásica sobre la eterna cuestión del baño?

Cuenta Robert Graves que en cierta ocasión, Zeus y Hera discutían (sí, otra vez) por el tema del baño. Zeus le reprochaba a Hera sus tardanzas en el toilette y la concurrencia masiva en compañía de diosas y pitonisas. Hera por su parte se quejaba de la suciedad y las humedades innombrables con que los varones del Olimpo decoraban los sanitarios.

Como el tema no tenía visos de progresar, decidieron una vez más contar con el testimonio irrefutable de Tiresias, que como sabemos se vio obligado a frecuentar los baños públicos de uno y otro sexo.


Tiresias escuchó los planteos, suspiró imperceptiblemente, y disimulando su hartazgo dijo: “ Si divides el rollo de papel higiénico en diez partes, una pertenece a los hombres y nueve a las mujeres”.

Zeus interpretó la frase como un aval a las damas, y enfurecido pateó el bastón del sabio adivino, partiéndolo al medio. Tiresias, con el ceño fruncido, profetizó lo siguiente:

“Oh Zeus, no descuides jamás los sanitarios. Recuerda que en breve estarás junto a tus colegas del Olimpo bajo la advocación de la ninfa Prostatis. Y entonces deberán frecuentar los sanitarios con más asiduidad que Hera y sus doncellas, especialmente durante las noches.”


Esta vez, la patada de Zeus hizo volar lo que quedaba del bastón hasta unas rocas cercanas, donde las infaltables serpientes espiaban la escena. El dios se alejó farfullando, Hera y sus doncellas ni se enteraron porque habían abandonado el debate para hacer fila en un perfumado toilette cercano, y el pobre Tiresias se sentó en las piedras en compañía de sus amigas reptiles, mientras agregaba:

“...Y nunca olviden poner un gancho en el retrete, que los viejos también necesitamos colgar el bastón en alguna parte limpia”.


Notas al muestreo Nº4: Tiresias manifiesta inquietudes en torno al baño en su etapa femenina, pero ignora olímpicamente el tema en su etapa masculina (sólo se presentó un sujeto a testimoniar). Sin embargo aprovechamos para comentarle a las señoras acerca de una nueva tendencia ecologista en el Primer Mundo, que bien podría servir de excusa para la mugre. Se trata de promover el ahorro de agua disminuyendo la cantidad de descargas del inodoro- aunque uno lo haya usado, se entiende. Para ello, se recuperó un viejo refrán que los abuelos de antaño colgaban como decoración en los baños:

"If it´s yellow, let it mellow
If it´s brown, flush it down!!"

El Equipo prefiere no traducir estos versos. Estamos a favor del ahorro de agua, pero preferimos ahorrar de otras formas menos espantosas, que tal vez comentemos en breve.

miércoles, 14 de enero de 2009

Receta para criar a los niños


Si te postran diez veces, te levantas
otras diez, otras cien, otras quinientas:
no han de ser tus caídas tan violentas
ni tampoco, por ley, han de ser tantas.

Con el hambre genial con que las plantas
asimilan el humus avarientas,
deglutiendo el rencor de las afrentas
se formaron los santos y las santas.

Obsesión casi asnal, para ser fuerte,
nada más necesita la criatura,
y en cualquier infeliz se me figura

que se mellan los garfios de la suerte...
¡Todos los incurables tienen cura
cinco segundos antes de su muerte!

No te des por vencido, ni aun vencido,
no te sientas esclavo, ni aun esclavo;
trémulo de pavor, piénsate bravo,
y arremete feroz, ya mal herido.

Ten el tesón del clavo enmohecido
que ya viejo y ruin, vuelve a ser clavo;
no la cobarde estupidez del pavo
que amaina su plumaje al primer ruido.

Procede como Dios que nunca llora;
o como Lucifer, que nunca reza;
o como el robledal, cuya grandeza

necesita del agua y no la implora...
Que muerda y vocifere vengadora,
ya rodando en el polvo, tu cabeza!

Pedro Bonifacio Palacios (Almafuerte)


"Niñas en el mar" (1909) Joaquín Sorolla y Bastida