martes, 23 de diciembre de 2008

Los 37 de Milgram



La historia a continuación es conocida. Estimado voluntario, haga click para que suene la música, y continúe leyendo. Durante los años 1961 y 1962, el profesor Stanley Milgram llevó a cabo una serie de experimentos sobre psicología social en la Universidad de Yale. Los voluntarios eran informados sobre la naturaleza del estudio, dedicado a investigar funciones relacionadas con la capacidad de aprendizaje y la memoria. Luego recibían por sorteo el rol de "maestros" o "alumnos". Cada maestro, bajo las indicaciones del director del experimento, debía interrogar al alumno ubicado detrás de un vidrio, y aplicarle una descarga eléctrica ante cada respuesta errónea, operando una consola.

La descarga inicial era de 75 volts con incrementos de 15 en 15 ante cada error, llegando hasta un máximo de 450 voltios.

Como es de suponer, el alumno se quejaba a partir de los 150 voltios. De ahí en adelante, se escuchaban gritos, golpes en el vidrio, aullidos, y eventualmente se llegaba al silencio, que sugería que el alumno había quedado inconsciente. En algunas variaciones del experimento, el maestro y el alumno no estaban separados por un vidrio, sino sentados uno junto al otro:


Finalizado el experimento, los investigadores agradecían al "maestro" su colaboración y le informaban que las descargas eléctricas eran inexistentes, que el "alumno" era un actor fingiendo los gritos de dolor, y que el sujeto de la experimentación era él mismo. El objeto real del estudio era la obediencia a la autoridad en conflicto con la conciencia del individuo.

Este estudio fue la base experimental de las observaciones realizadas por Hannah Arendt sobre el juicio a Adolf Eichmann, realizado seis meses antes, que suscitó profundos cuestionamientos sobre los límites de la obediencia y la conciencia. Milgram buscaba evidencia científica que explicara la conducta del individuo normal y común sometido a la autoridad, y compelido a llevar a cabo órdenes inaceptables que implicaran la tortura y el sufrimiento agónico de otro ser humano.


¿Cuales fueron los resultados del experimento de Milgram? Los principales resultados fueron:

- Individuos que rechazaron realizar el estudio: 0%
- Individuos que aceptaron aplicar el máximo voltaje: 62.5%
- Individuos que desistieron antes de llegar al máximo voltaje: 37.5%


- El experimento se llevó a cabo en idénticas condiciones en ocho países distintos. No se observaron resultados diferentes.
- No se observaron diferencias entre el comportamiento de hombres y mujeres, excepto los mayores niveles de stress registrados entre las mujeres "obedientes".
- Ningún participante interrumpió el estudio para verificar personalmente el estado de salud del falso alumno.
- Muchos participantes se mostraron dispuestos a continuar más allá de los 450 voltios.
- Reacciones de los participantes ante los gritos: algunos expresaban preocupación, muchos reían nerviosamente, y un número significativo culpaba al "alumno" por sus errores, afirmando que se merecían el castigo.
- Los niveles de obediencia disminuyeron ligeramente en los siguientes casos: cuando existió proximidad física entre el maestro y el alumno, cuando el experimento se llevó a cabo en una oficina anónima y no en la Universidad, cuando se incorporaron al estudio falsos "maestros" que expresaron su oposición al estudio, entre otros.
- Milgram enviaba a los participantes un cuestionario donde debían indicar de 1 a 5 su grado de conformidad o desagrado por haber participado. Los individuos que expresaron disgusto por su participación fueron apenas el 1.5%

En palabras de Stanley Milgram, algunas de las conclusiones del estudio fueron las siguientes:

"Una importante cantidad de personas harán lo que se les ordene, sin tomar en cuenta los contenidos del acto y sin limitaciones de conciencia, mientras perciban que la orden proviene de una autoridad legítima".

"La psicología social revela una lección importante: para determinar cómo va a actuar una persona, a menudo no importa tanto la clase de persona que sea, sino la clase de situación en la que se encuentra".

"La esencia de la obediencia consiste en que la persona llegue al punto de a verse a sí misma como un instrumento para los deseos del otro, y por lo tanto deje de considerarse responsable de sus acciones."

"El individuo enfrenta mejor la autoridad con el apoyo grupal de otros. El apoyo mutuo es el más fuerte baluarte que tenemos contra los excesos de la autoridad".

"Es posible que seamos marionetas controlados por las cuerdas de la sociedad. Pero por lo menos somos marionetas con percepción, con conciencia. Y tal vez nuestra conciencia sea el primer paso para nuestra liberación".


El Experimento de Milgram fue filmado en su documental "Obedience". También fue citado, comentado, y representado en numerosos films como "I como Icaro" , "Ghosts of Abu Ghraib" y "Enron: The Smartest Guys in the Room".

En 1986, Peter Gabriel lanzó el álbum So, con la canción "Milgram´s 37- We do what we´re told" que remite a los 37 desobedientes. Otro gran inglés, Peter Hammill, criticaba que en varios de sus conciertos Gabriel interpretaba la canción induciendo a los asistentes a cantar una y otra vez el estribillo "Hacemos lo que nos ordenan", repetido mecánica y robóticamente por cientos de personas. Según Hammill, esto confirmaba en forma siniestra los experimentos de Milgram antes que inducir a una reflexión.

En cualquier caso, ya sea en un gabinete universitario o en un recital, en algún lugar la cuestión nos está esperando y nos va a encontrar.

11 comentarios:

Gabriela dijo...

digamos que un ejemplo muy al alcance de la mano es el caso de la relación paciente-médico y enfocándonos en la relacion marital tenemos casos de verticalidad abrumadora.

Saludos!

Cámelas, Benito dijo...

La sociedad en que vivimos castiga duramente a quien no sigue las reglas -a excepción, cuando no, del chiquero- sometiéndolo al escarnio público.
Mucha gente habla gratuitamente acerca de las torturas y su aberrante condición, cuando Milgram nos demuestra muy fácilmente que el dolo, mientras sea ajeno, NOS CHUPA UN HUEVO.
La condición humana fue, es y será miserable. Lo que mueve al mundo es el ego, el YO.
Personalmente he vivido la experiencia de rebelarme al no aceptar instrucciones de un par de jefes déspotas, anecdota que requiere mejor explicación, pero que confirma que cuando no cumplís reglas, y no tenés un par de millones de dólares en el Banco, te rompen el orto sin piedad.
Milgram también nos demuestra que la gente que recibe ordenes no suele cuestionarlas si considera a la autoridad legítima. Hay casos sobrados, basta ver Guantánamo hoy día, lo que hacen los judíos desde que se independizaron, lo que han hecho nuestros militares, lo que hacen algunos con sus parejas (hombres o mujeres) para poder dilucidar que en condiciones ideales de presión y temperatrura, y con poco margen de maniobra, todos tenemos un Dr. Mengele en un rincón del corazón.
Lo bueno es saberlo, no negarlo como idiotas, como generalmente hacen los constructores de relatos psicobolches. Los regímenes comunistas, el mismísimo Che, han torturado y amasijado a miles, centenares de miles de personas, justificando su procedimiento en la Revolución. Esto finalmente indica que con un buen justificativo, cualquier ser humano (menos los 37 rebeldes), le pone la picana en el orto al prójimo si cree que su causa es justa.

Almafuerte dijo...

La esencia del estudio es tener conciencia, pensar por uno mismo y hacerse responsable, ya sea que decidas obedecer o no.

La irresponsabilidad infantil, la obediencia debida, la apelación a que "alguien" se haga cargo, etc. está presente en cada mínimo hecho de nuestra sociedad. Hoy iba pensando ésto mientras iba por la calle observando la impresionante cantidad de mugre y suciedad del espacio público.

Qué espíritu navideño el mío!!! Jo jo jo!!! 200 voltios, feliz navidad!!!

Cámelas, Benito dijo...

Cuando sos rebelde con poder o con plata que es muy similar, te denominan "trasgresor". Cuando procedés de igual manera, pero sos un pelagatos, te convertís en un pobre pelotudo.
Ejemplos:
El Guanaco Patagónico se sube a un atril y tira mierda a los cuatro vientos. Trata de fracasada a Carrió, a Cobos de pelotudo, a los periodistas de turros, y la claque aplaude y rie babeante las "ocurrencias" del Jefe.
Dentro de un tiempito, si el Guanaco se sube a un atril, ántes de empezar siquiera a hablar, recibirá un tsunami de zapatos al mejor estilo Bush, si es que alguno de los que sufrieron sus atropellos no lo hace cagar antes de 4 tiros por la espalda.
Basta ver al Carlo para saber el futuro inminente.
Otro ejemplo: Sos De Narvaez, y el tatuaje en el cogote es sexy. Sos un 4 de copas, y el tatuaje en el cogote te lo tenés que sacar con el pelapapas, porque ni siquiera te abren la puerta del geriátrico.
Es una cuetion de PESOS simplemente. ¿O acaso al Diegote no se le perdona todo lo que haga y diga, porque tiene billetera tupida, acceso a los medios y porque el que le saca una declaración factura en euros? Que haga una declaración pública Delfor Medina y Carlitos Balá juntos. No salen ni en el Canal Rural.

Cámelas, Benito dijo...

Gefa:
Yo soy bastante observador del comportamiento humano, sin ningún tipo de pretensión sobre el particular. pero en general, hay situaciones donde involuntariamente y funcionalmente, debo ser "árbitro" de situaciones, como si fuera una especie de juez. Cargo que no tengo ni me interesa, pero huelga decirlo, en el laburo a uno le garpan para que se haga cargo. Ayer, una Sra. (que a los efectos de este estudio llamaremos "vieja de mierda", para preservar su identidad), de peluquería, elegante y como corresponde a Recoleta, vino acompañada de su esclava peruana personal, que le hacía la fila mientras la vieja de mierda intentaba hablar por celular sentada, ingresó a la Sucursal donde yo estoy, pero para ingresar, la vieja de mierda, se coló. Para colarse, primero me mordió y simultáneamente me pateó la canilla. Obviamente, para cobrar los $ 200 de mierda que les regaló la Cretina con la plata de mi AFJP.
Por eso le digo, que en condiciones de tumulto, la gente cambia el comportamiento. Y aparece mi especie favorita: El Vivo Criollo, que se consigue carnet de discapacitado y pasa delante de gente muy mayor, enferma y que $ 200 les cambia la vida, simplemente porque tiene acordado un privilegio.
Una vez que pasa la situación, y analizada friamente, es bastante patética. No quiero imaginarme la cubierta del Titanic en 12 de abril de 1912. Debe haber habido escenas de extrema cobardía y supremo heroismo a pocos centímetros de distancia una de otra.
Pero así somos. Un asco.

Cámelas, Benito dijo...

Por un momento, ayer me acordé de Gabriela .
Me imagino, no se por qué, que si la Gefa hubiera estado y se le cuela la vieja de mierda, la agarra de los pelos y la boxea, a ella y a la esclava peruana que la hacía el aguante.
Obviamente, a mi me está vedada la violencia física con el público, pero me hubiera gustado -y esto habla de lo mal que estamos- que alguno de los damnificados porque la vieja de mierda se le coló, la hubiera cagado a patadas. Pero no, la gente perjudicada, simplemente miró para el costado y se dejó culear por la vieja de mierda y su esclava peruana.

Almafuerte dijo...

Gefe: fíjese en una de las reflexiones de Milgram, referida al apoyo mutuo entre las personas para resistirse al autoritarismo o al atropello.

Siempre hay un momento en el que lo único que hace falta es que alguien tome la iniciativa. Si hay uno que pacíficamente pero con firmeza tome la delantera y diga "NO", todos apoyarán el no. Si hubiera habido alguien con el ánimo de hacerlo, la sra. vieja de mierda del caso hubiera salido despedida del banco.

Hay situaciones que están a punto, solamente hace falta una pequeña acción para funcionar como catalizador. Eso lo he comprobado personalmente en más de una ocasión, y trasladado al campo político es lo que estoy esperando ver: el malestar, la angustia y la insatisfacción traducidas en acción positiva de cambio de lo que ya reconocemos que está mal.

pau dijo...

Muy buen post: deja pensando.

Solemos olvidar demasiado que, antes que individuos (células o puntos), somos un tejido; eso hace más dificil entender la naturaleza de nuestros actos, a los que no se les escapa el dato de que solos ni somos o, a lo sumo, apenas una idea (lo que no es poco).

Al jóven Cámelas le recomiendo ajustar ciertos acertos luego de leer por lo menos la primera parte de la Teoría de los Sentimientos Morales de Adam Smith.

S2

Cámelas, Benito dijo...

Almafuerte:
La Sra. Vieja de Mierda del estudio antropológico que describo, recibió el "No" fuerte y claro de quien suscribe. Cagándose olímplicamente en mi, y el las cerca de 200 personas a las que se les coló, montó su espectaculo "me hago la loca", peló dentadura y btin pateador de traseros, y arremetió contra eu, o sea, YO.
En un momento, temí que la gente la fuera a linchar, pero la gente optó por hacerse la boluda masivamente.
La gente es muy rara, vio?

Calavera dijo...

Che, pero... gran parte de la religión (cualquiera, salvo quizás el budismo) ¿no es, justamente, poder responsabilizar a otro de los que nos pasa?

Dios quiso que fuera así.

No puedo ni siquiera imaginarme cuestionar el experimento, más que nada por la inmensa falta de conocimiento de mi parte, pero... me parece un poco obvio: ¿qué más puede querer un ser humano que la oportunidad de ser sádico y que la responsabilidad sea de otro?

Tampoco es evitable pensar en qué hubiera hecho uno de haber sido elegido como "maestro". Yo quisiera pensar que me habría rehusado a torturar a alguien... pero eso digo ahora, claro, como todos.

Anónimo dijo...

Hola, muy interesante el post, muchos saludos desde Mexico!