Sabemos que estos son tiempos de discusiones sobre la hegemonía, la contrahegemonía, la superestructura, los antagonismos en la sociedad, el mensaje y la construcción del relato. En consecuencia, la política se concentra en debates sobre el control de los medios de comunicación, en cambiar el nombre de avenidas e instituciones, en reemplazar símbolos, en instalar nuevos mitos, en discursos, ensayos, atriles, blogs, desfiles, eventos, estadios, micrófonos...
Sin ánimo de polemizar con intelectuales ni pensadores, creemos que conviene ir teniendo un plan B para cuando éste ciclo termine y llegue la cuenta (porque toda época tiene su final). Por eso, ofrecemos un programa de gobierno que de tan viejo hasta parece novedoso. No hace falta reinventar la rueda, es simple:
"La única política de que ha de ocuparse nuestro papel será la política económica, que según nuestro modo de ver es la verdadera política de estos países: gobernarles de modo que se llenen de riquezas, población, movimiento y bienestar social, hacer que sus puertos se pueblen de embarcaciones, se llenen de movimiento nuestras costas, se abastezcan ricamente sus mercados, hacer que su población esté bien alojada, bien vestida, bien mantenida y provista de todo lo necesario, que los pobres disminuyan gradualmente y los ricos se multipliquen; que los andrajos, que la miseria y sus repugnantes dolencias desaparezcan de nosotros: he aquí todo el arte de gobernar; he aquí el gran objeto de la política interior de los estados de América del Sur".
"Nuestros estados fueron militares cuando fue menester sacudir el despotismo, apoyado en soldados. Hoy son llamados a ser comerciantes, para ganar la fortuna que no tienen. El peor enemigo es la pobreza: este enemigo no se bate con soldados, sino con comerciantes y trabajadores".
Juan Bautista Alberdi en El Comercio de Valparaíso Nº1, 20 de noviembre de 1847
Imágenes: Bansky
11 comentarios:
Ah! con razón. Un protogorila cipayo, encima desde Valparaíso, un vendepatria al servicio de la corona inglesa.
Alberdi era un capo.
Saludos
Amiga, tengamos dos/cuatro años mas de populismo berreta y ordinario.
Cuando moyano nos ponga el pais de sombrero y la señora huya a disfrutar de sus euros y carteras, o una de dos, guerra civil o este plan sencillo.
PD: ¿Como estuvo el corte de pelo? No hace falta que Dior te ayude mas de lo que natura ya hizo, solo son retoques a la perfección.
Nuestro futuro no se parece a eso. No se parece nada. Por desgracia.
Un saludo.
Victor:
Alberdi era un coloso, aunque se lo quiera denostar desde el siglo XXI por ideas o expresiones que tenían un contexto de doscientos años atrás.
Por cierto, hubo épocas en las que los más brillantes y visionarios (con distintas ideologías) trazaban el rumbo. Hoy no, el timón de la gestión y las ideas está en manos de gente de recontra décima. Y los Alberdi no se sabe dónde están.
Saludos.
Hegeliano: una persona que conozco vivió bastante tiempo en Chile, y siempre dice que la experiencia del gobierno de Allende los vacunó para siempre contra los experimentos fallidos de la política. Acá en cambio parecemos inmunizados, hay que volcar y sacrificar años en el camino.
Con respecto a la peluquería, ud. es un caballero y agradezco su galantería desmedida. Pero como decía mi abuela, no se puede sacar aceite de las piedras...
Yoni:
Comparto el pesimismo. Pero tengamos en cuenta que en medio del baile uno no tiene una visión muy clara de las cosas.
Y yo por lo menos nunca acierto en nada. Así que, quien sabe...
Notable.
Alberdi y Bansky conviviendo de modo pertinente en un mismo post.
Saludos.
Alberdi fue un grande en serio. El revisionismo histórico berreta trata de descalificarlo (y animalizarlo) sacándolo de contexto. Como ya sabemos. para ellos, "al enemigo ni justicia".
Mensajero:
Me encantan las asociaciones libres, siempre sale lo mejor de esas yuxtaposiciones inesperadas. No se si será este el caso.
Victor:
El revisionismo siempre saca de contexto, son los vivos que juzgan con los resultados en la mano y el diario de hoy.
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